VENECIA 24: JORNADA 7, QUEER DIVIDE A LA CRÍTICA

Dos nuevas películas se presentan a concurso, Queer de Luca Guadagnino adaptando a William S. Burroughs y Harvest, primer trabajo en inglés de la directora griega Athina Rachel Tsangari.

Venecia supera el ecuador de su 81 edición manteniendo todavía el foco con estrenos tan esperados como el de Queer, nuevo largometraje de Luca Guadagnino que regresa al festival con una controvertida adaptación de una novela de William S. Burroughs y que ha sido uno de los títulos más divisivos vistos en competición.

Daniel Craig, Drew Starkey, Lesley Manville y Omar Apollo han viajado hasta el lido veneciano y han respondido una y otra vez a las preguntas sobre como es rodar unas escenas de sexo tan explícitas. La película será la comidilla cinéfila de la temporada, tanto por su carga homo erótica como por su tono experimental.

También en competición se ha podido ver Harvest, la tercera película de la directora griega Athina Rachel Tsangari que rueda por primera vez en inglés y dirige a Caleb Landry Jones en el relato de época de un mundo en extinción ambientado en una remota aldea escocesa en el siglo XVII.

Panel de la crítica

Sin cambios en el panel de la crítica que sigue liderado por The Brutalist de Brady Corbet. Queer debuta discretamente con un 2,75 y se queda en tierra de nadie como la película de Athina Rachel Tsangari, Harvest que lo hace con un 2,54.

Fuente: icsfilm.org

Sección Oficial

Repasamos las primeras reacciones a los dos títulos que han competido en esta jornada por el León de Oro.

QUEER

Había mucha expectación para ver lo que había hecho Luca Guadagnino con el relato en primera persona de William S. Burroughs a la hora de llevar a imágenes Queer. El propio presidente de la Mostra, Alberto Barberá había caldeado el ambiente con declaraciones que advertían del riesgo de sus secuencias sexuales y los sucesivos remontajes que había sufrido la película hasta llegar a la versión de dos horas y quince minutos que se ha proyectado en competición y que ya en su pase de prensa se llevó el abucheo de algunos periodistas incómodos con algunas secuencias de carácter sexual.

La crítica se ha mostrado abiertamente dividida y la describe como un relato turbio, artificioso y terriblemente oscuro (…) sobre la decrepitud, el dolor de las derrotas y la claustrofobia de las comunidades marcadas. Lee la crítica completa de Luis Martínez haciendo clic en la imagen:

Y sobre las comentadas escenas sexuales que jalonan la película, Martínez apunta: el sexo que se ve es sexo con todas las consecuencias. Sin vergüenza ni atajos. Es sexo homosexual primero, pero, luego, mucho más: es sexo "descorporizado" y, ya sí, plenamente 'queer', plenamente Burroughs, plenamente pleno.

Sobre esa idea de lo descorporizado redunda Manu Yañez en su crónica para Fotogramas: Queer encauza su destino cuando el protagonista, en un arrebato lírico, pronuncia un lema extraño: “I’m not queer, I’m disembodied” (“No soy queer, soy incorpóreo”). Y es justamente sobre la sugerente dialéctica entre lo corpóreo y lo etéreo, lo material y lo espiritual, donde la película de Guadagnino va tejiendo su estructura final.

En muchas reseñas se ha referenciado a Queer como reverso sombrío a Call Me By Your Name (2017) En una de las entrevistas que ha dado, el propio Guadagnino explicaba como las secuencias sexuales en una y otra eran necesariamente diferentes: En Call Me by Your Name, había que dejar el telón cerrado para que los amantes exploraran su idilio. En el caso de Queer, se trata de una película sobre el sueño febril de la conexión y la desconexión. Y la única forma de comunicar realmente la profundidad de su conexión, y la negación dramática que los habita, es que tienes que ver su interacción. Desde la forma en que viajan juntos; la forma en que beben juntos; la forma en que follan juntos; hasta la forma en que están separados y juntos.

Y así lo recoge también Yañez en su crítica: Allí donde Call Me by Your Name estudiaba un ardor puro, inocente, Queer observa el resquebrajamiento provocado por una vejez no idealizada, colmada de decrepitud.

Y ahí es donde se entra a valorar el trabajo de Daniel Craig que todas las críticas, incluso las malas destacan como motor de la película, incluso en sus peores pasajes:

Uno de los aspectos que más controversia ha provocado ha sido la decisión de recrear en los estudios de Cinecitta parte de ese México decadente que describe Burroughs en su novela y que para algunos críticos esa visión estilizada, es la de un turista de lujo que no profundiza y le resta autenticidad.

… pero para otra parte de la crítica en cambio, ese empeño esteticista la empareja estéticamente con títulos como Querelle de Rainer W. Fassbinder aunque a los fans de Burroughs les pueda parecer algo edulcorado aunque como escribe Hannah Strong en Little White Lies: es una película menos directa que cualquier otra que Guadagnino haya hecho antes, y ciertamente menos obvia en su ejecución, pero quizás eso esté en el espíritu de la obra de Burroughs, tan desigual, ridícula y poco fiable como era. Burroughs creía en la magia y, al ver Queer, uno tiene la sensación de que Guadagnino también.

Finalmente, destacar el carácter experimental con el que Luca Guadagnino y su guionista, Justin Kuritzkes resuelven los capítulos más lisérgicos de la obra de Burruoghs, una obra inacabada, diríamos que inadaptable y que la crítica ha emparejado con el cine de David Lynch o David Cronenberg (que ya llevó al cine otra de sus obras, The Naked Lunch generando igualmente, mucha controversia en su día)

HARVEST

Segunda vez que la directora griega Athina Rachel Tsangari compite en el Festival de Venecia (la primera fue en 2010 con Attenberg, su debut) donde presenta Harvest, su tercera película. A diferencia de las otras dos que eran guiones originales en esta ocasión adapta una novela de Jim Crace ambientada en lugar indeterminado de los Highlands en una época oscura que Indie Wire describe como si Terrence Malik hubiera dirigido el remake de Dogville.

Sophie Monks Kaufman destaca que Tsangari no está tan interesada en la trama (los acontecimientos clave están rodeados de una deliberada vaguedad, viene a escribir) como en construir una determinada atmósfera para lo cual el trabajo de su director de fotografía, Sean Price Williams es protagonista, tanto para ahondar en la oscuridad que anida en las gentes del pueblo como contrastarla con impresionantes planos de un campo en la golden hour.

Lee la crítica completa haciendo clic en la imagen:

Guy Lodge en Variety también incide en ese tono de fábula salvaje que sumerge al público en el barro, el sudor y las lágrimas de la agricultura preindustrial.

Un mundo que como escriben en Little White Lies está en plena transformación lo que provoca ese miedo irracional que desata la tragedia..

… aunque por otro lado, tampoco hay en el discurso de Tsangari melancolía o duelo por ese paraíso perdido:

Secciones Paralelas

Una de las sorpresas de Orizzonti ha sido la película Anul Nou care n-a fost (The New Year that Never Came) del cineasta rumano Bogdan Muresanu y que la crítica asegura, hará las delicias de Radu Jude.

Y en la Jornada 8 se verá…

El festival entra en su recta final con su último plato fuerte de la programación, el estreno mundial de Joker: Folie À Deux de Todd Phillips que regresa al lido donde hace cuatro años ganó contra pronóstico el León de Oro a la Mejor Película con la primera entrega.

Ahora, en clave musical, incorpora a Lady Gaga al reparto y promete colapsar Venecia y las redes sociales.

Además otras dos películas más se verán en esta octava jornada a concurso: la francesa Jouer Avez Le Fou de Delphine Coulin y Muriel Coulin y la italiana Diva Futura de Giulia Louise Steirgerwalt.

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